lunes, 20 de diciembre de 2010

Mou: Nietzsche estaría orgulloso


El übermensch que describió el alemán (dicen las malas lenguas que fue el filósofo que inspiró el nazismo) en 1874 tiene hoy nombre y apellidos. Y no es ni político (demasiado "correctos" en su escaparate), ni médico (atados por el corporativismo), ni periodista (puntales contemporáneos de la servidumbre moral), sino entrenador de fútbol. A quién entrene es casi lo de menos, porque la conjunción de sus virtudes trasciende lo genérico, y su método pasional termina siempre por sugerir un objeto distinto al que monopoliza la colectividad.
José (O Xosé, o Yusé, o Sosé, según el medio que lo nombre) Mourinho maneja el espectro mediático como nadie. Se ha impuesto a la tecnocracia sin mucho esfuerzo y se sabe por encima del bien y del mal porque siente que ÉL es el bien, y que, en último término, también es el mal a combatir por aquellos que no aceptan su superioridad intelectual. Ha construido, como propugnó Nietzsche, una escala de valores a su medida. Domina, ata, corta y pega donde quiere y a quien quiere. Ha conseguido, allá por donde ha pisado, redirigir la opinión pública, asfixiar la predecibilidad, hostigar y despertar tanto odio como admiración.

En contra de lo que muchos han escrito, Mourinho está muy lejos de parecerse lo más mínimo a Maquiavelo. No al menos en cuanto a la percepción histórica del italiano, que transmite a través de su obra 'El Príncipe', en la que subraya que el fin justifica los medios (algo inconcebible para el tierno consorte ético actual). Para el portugués no hay fines, ni medios, sino disfunción y contexto. Un contexto que cree viciado y que nota por debajo de su figura y de su poder, de su atracción y su magnetismo, rendido a su superioridad.

"Querer es poder", dijo Nietzsche. Y Mourinho, el súper-hombre actual, puede todo lo que quiere. Se le critica por desviar la atención, pero siempre lo termina consiguiendo. No es como el niño que deja de llorar cuando le ignoras, o el perro que aprende a no orinarse en la alfombra. Triunfa en absolutamente todo lo que se propone, ya sea irritar o caer bien, algo que resalta especialmente trabajando en una entidad como el Real Madrid, en la que el narcisismo y el exabrupto ario calan a la perfección. Le odian tanto por pensar como por desear, tanto cuando razona y hace listas como cuando aprieta los dientes y se ríe del rival. No sólo está acostumbrado a ser superior, sino también a sentirse superior. Cada crítica que recibe lo fortalece. Cada envidia que fecunda no hace sino darle la razón.

Mourinho es, para el grueso y la masa, un fanfarrón, un fantoche, un ser despreciable. Alguien conocido no solo por lo que gana como entrenador sino por lo que le gusta reiterarlo y alardear de ello. Nietzsche escribió en 'El Anticristo' que la compasión es para los débiles, para la clase baja, para los incapaces. Mourinho sabe que la modestia la inventó un incapaz. Y sigue moviendo una cantidad de tinta cada día que no hace más que darle la razón. Si el Madrid lo despide, podrá decir que el club no supo estar a su altura ni manejarle, lo cual reforzaría la omnipotencia y la libertad cruda del súper-hombre que relató Nietzsche. Y si lo mantiene en el cargo, pasará a ser un siervo del portugués. A Mou le pintan cuernos y bigote en cada foto, y más allá de los resultados, lo que le alimenta es la envidia. Y ya se conoce el dicho: ¡ay, si fuera tiña!(particularmente en España...). Algo me hace intuir que ha encontrado su sitio.

@m_manero

2 comentarios:

  1. Gran artículo, me ha encantado el simil con el superhombre, muy bien traído.

    Si tenemos en cuenta que el Superhombre es aquél que no tiene miedo a la diferencia, que desarrolla sus propias reglas morales,que se debe a ellas, y que nunca escoge el camino fácil, creo que hemos retratado a Mou.Al menos en el mundo del fútbol encaja perfectamente en la definición.

    Es un incomprendido astuto e inteligente.Aunque también algo chulesco y fanfarrón. Y si sabe jugar bien sus cartas, al final triunfará por encima de sus detractores.

    Un saludo!

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  2. no sabía que este blog iba de pornografía... menuda comida de nabo.

    Amneris F

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