jueves, 12 de abril de 2012

NO PUEDO VIVIR SIN TI



La de la foto no soy yo. Lleva las uñas rojas y yo siempre 
me lavo las manos después de matar a alguien

No sé si habéis sentido alguna vez esa desolación, la provocada por su ausencia. Mirar el móvil una y otra vez para comprobar si tienes señal suya. Que no haya ni rastro. Hora tras hora, así durante días. Con la incertidumbre de qué estará pasando. ¿Os ha pasado alguna vez? A mi sí. Durante tres días completos. Durante tres largos días... No tuve internet.
Esta Semana Santa fui a pasar unos días a París e intenté desconectar del trabajo. ¿Cómo? Desconectando el internet de mi Iphone. Bueno, por descansar y porque no quería vender el riñón derecho para pagar la factura de teléfono. El izquierdo lo vendí para llenar el depósito de mi coche.
Pensé que podría aguantarlo, pero a los 20 minutos de llegar a Francia, ya había mirado 5 veces mi twitter sin actualizar, las 4 primeras por inercia, la quinta para ver si pillaba wifi gratuita. A las dos horas tenía sudores, escalofríos, depresión, mal humor. A las seis horas le hice follow a una tía que masticaba chicle con la boca abierta. Para los que no sepáis que es hacer follow, es empezar a seguir a una persona. A ésta la empecé a seguir con un bate, concretamente. Y ahí me di cuenta, soy adicta a internet, a Twitter, a mi correo electrónico, a los juegos online, a las últimas noticias, a los últimos virales… Soy tan adicta a ver vídeos en internet, que me compré un iPad porque la polla de Nacho Vidal no cabía en la pantalla del iphone.
Así que empecé a recapacitar sobre mi adicción. Y ahí empezó a aflorar todo. Tú te das cuenta de que eres adicta a Internet cuando tu chico te pregunta: "¿Cuándo te tiene que venir el periodo?" Y tú le dices “consulta el calendar del gmail”. Cuando mi madre me dice que le estoy agotando la paciencia y le digo que compre más en eBay. Cuando no tengo conexión a internet y compruebo si se la puedo chupar a algún vecino. Así me da la clave del wifi.

Y cuando eres adicto, lo sabes, pero no lo reconoces. Mi madre entra en mi habitación y me pilla con algo entre las manos y yo grito ¡QUÉ TWITTER NI QUE TWITTER!
Estoy tan enganchada a Twitter que se me ha luxado el dedo índice. Y para colmo, os reproduzco la última conversación que tuve con un amigo:
-        Raquel, eres tecnosexual.
-        ¿Y eso qué es?
-        Eso es que disfrutas más con un aparato electrónico que con un chico en bolas.
-        (Cogí el iPhone y lo acerqué a mi cara. Aspiré) ¿Tanto huele?

NOTA: Un abrazo a todos los enganchados como yo y espero que os haya sacado al menos una sonrisilla. Un lujazo estar en este blog.

16 comentarios:

  1. Una sonrisilla no... Muchas!!! Lo del follow a mi tia con el bate en las manos por masticar chicle con la boca abierta... ¿Seremos primos?

    Muy bueno, corto y bueno... Como casi-todo :)

    ResponderEliminar
  2. Lamentable, la publicación más pobre de este gran blog. Esa falsa idea de poder ganarse la vida como humorista en twitter por ser un poco "burra" está haciendo mucho daño. Alcohol, barbitúricos, motel de carretera y chistes plagiados...

    ResponderEliminar
  3. Yo también estoy enganchao al twitter y de hecho yo x el twitter MA-TO y x los trending topics RE-MATO ME ENTIENDES?

    ResponderEliminar
  4. A mi me encantó el post. Rápida y mortal. Cortita y al pie!
    Bravo.

    Jordi

    ResponderEliminar
  5. Jeje, muy bueno, vas a necesitar un tratamiento de choque para desengancharte

    ResponderEliminar
  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya no se ni responder en un PC normal, malditos smartphones y otros trastos, me siento identificado con lo que ha puesto esta "enganchada".

      Eliminar
  7. Estoy de acuerdo en casi todos los comentarios que me preceden...o casi estoy de acuerdo con todos ellos, que no es lo mismo. Incluso con ese criticador tan necesario que se esconde tras "anónimo", con él tambien estoy "algo" de acuerdo. Posiblemente no sea la entrada más extensa ni la más interesante de las publicadas hasta hoy. Tampoco creo que Raquel Sastre se sentara a escribirnos esto con la idea de adoctrinarnos o culturizarnos. No, ella nos ha dejado una mínima muestra de su talento para hacer reír a la gente. Más allá de la típica aspirante a humorista "burra" en twitter que abusa de la fórmula que mencionas (alcohol, sexo, drogas y plagios) le recomiendo al "comentarista anónimo" y al resto de los lectores que, si no pueden tener el placer de ir a ver una actuación suya, al menos busquen vídeos de Raquel en youtube, que los hay y muy buenos, y verán que es más que una simple "payasa de twitter".

    Tras mi defensa a la autora (he de decir que, efectivamente, ha sido, o se me ha hecho, algo corto), toca primero agradecerle su dedicación (altruísta) para hacer reir a gente que ni conoce. Yo podría ser perfectamente el prota de esta historia, aunque cambiaría París por Benidorm y Eurodisney por Terra Mítica (cuestión de presupuesto). Reaccionaría igual ante la situación de no tener internet ya que, al igual que Raquel, tengo la necesidad de actualizar Twitter cada 5 minutos. Uno de los motivos de mi enganche a esta red social es seguirte a ti y tener la inmensa suerte (no te flipes, tambien se lo dije a María Casas) de que me sigas. La interactuación con personas que van más alla de tu entorno cotidiano, con gente extraordinaria para tí, es la gran sustancia que segrega twitter. Yo cuando te empecé a seguir ni siquiera sabía quien eras, pero sabía que conectaba con tus ideas, en cierto modo teníamos mucho en común aunque cada uno con ese puntito especial que nos hace únicos. No hace tanto de eso, pero te puedo asegurar que se establece un vínculo. Un vínculo que hace que viva tu debut en Paramount como algo especial. Lo grabé incluso por esa sensación de decir "joder, sale mi amiga Raquel en la tele", o cuando intervino tu hermano en el hormiguero, me emocioné pensando en lo que podías sentir tú de verle allí. ¿Cómo no vamos a estar enganchados a Twitter con lo que nos aporta? Este mismo blog, sin ir más lejos, no tendría razón de ser sin la mediación de Twitter entre escritores y lectores.

    Como no estaría bien que un comentario se extendiese más que la entrada, voy a dejarlo ya (aunque tengo cuerda para rato) que mi mujer me está llamando "puto viciado" con la mirada, dándote la enhorabuena y deseando que sigas igual.

    P.D: Tan enganchada que dices estar y el poquito caso que me haces.

    ResponderEliminar
  8. Joder Joel, has escrito un comentario más largo que la entrada. Te mereces un pin o algo.

    ResponderEliminar
  9. Jajajajaja que bueno!!! Es que es la realidad del 80% de las personas que tiene internet en el movil!!! Te invito a que te pases por mii blog!! Un saludo

    ResponderEliminar
  10. Sigo el blog por Raquel. Dicho esto, humor arriesgado. El que no le guste, que ponga Intereconomía. Buenas tardes

    ResponderEliminar
  11. Me alegra conocer tu faceta bloguera, una primera entrada simpática que deja buen sabor de boca y ganas de una próxima en 30 dias

    ResponderEliminar
  12. muy bueno¡¡¡¡ uffff todo el tiempo enganchados¡¡¡¡ y dejarlo es muy jodido¡¡¡ es como que algo no va no va...

    ResponderEliminar
  13. Lo siento, mira que lo intento, voy predispuesta a reirme con esta chica pero nada, no me saca ni una pequeña sonrisa, nada. Sus chistes de caca pedo culo pis no tienen gracia y muchos estan sacados del dia a dia en Twitter. Quizas dejé de ver el Hormiguero porque ultimamente los guiones son del mismo estilo, ahora se entiende todo. En fin, que esta chica es una moda de algunos, pasará como todo y nadie se acordará, como de tantos otros.

    ResponderEliminar
  14. Voy yo y me abro una cuenta de twitter sólo para saber donde actua este peazo de mujer!! Y otr@s no saben apreciar su humor y encima la critican... este mundo está al revès.
    Raquel, no puedo esperar a que vengas a Mallorca!!
    Un beso!!

    ResponderEliminar